viernes, 29 de enero de 2010

Bajón

Llevo unos días un poco desanimada… Están pasando una serie de cosas en mi vida, que hacen que me sienta cansada y sin ganas de nada.
Una de las causas es el trabajo (sí, ya sé que iba a intentar no quejarme por el dichoso curro…), pero el hecho de que estén habiendo cambios y el pasarme 10 horas todos los días en la oficina, no ayuda mucho (y no, no me pagan horas extras).

Aunque no es simplemente éste, el motivo de mi apatía. También es el ver, día a día, cómo se comporta la gente, la falta de educación (que abunda en este país, por cierto) y lo malas que podemos llegar a ser las personas. No sé si será a consecuencia de la crisis, pero creo que todos deberíamos poner un poco de nuestra parte para hacer que esta época por la que estamos pasando sea un poco “menos mala”. Una sonrisa, un “buenos días”, un pequeño gesto de cariño… tampoco creo que sea mucho, ¿no?

jueves, 21 de enero de 2010

Haití

No es necesario que os recuerde la tragedia que está viviendo Haití en estos momentos, ni la destrucción y el caos que reina allí, ni la cantidad de gente que lo ha perdido todo (incluyendo a sus seres queridos). Simplemente con ver las noticias en la televisión y en los periódicos, es más que suficiente para hacerse una idea.

Es por ello que me gustaría aprovechar este espacio para pediros vuestra colaboración y que hagáis una donación económica (por pequeña que sea) a esta causa. La manera de hacerlo es muy sencilla: desde aportaciones on-line (a través de páginas web como Cruz Roja) hasta ir a cualquier entidad bancaria donde os informarán de las asociaciones que tienen una cuenta y hacer el ingreso en el momento.

Yo ya lo he hecho, y estoy segura de que toda esa pobre gente os estará agradecida eternamente.

viernes, 15 de enero de 2010

Se acabó lo bueno

El día de Reyes llegó y pasó, y con él terminaron las comilonas, las juergas, las resacas y, como no, las vacaciones navideñas (sniff). La vuelta a la rutina es inevitable…

El día 5 trabajé hasta mediodía y por la tarde, como ya va siendo costumbre desde hace unos años, toda la familia nos juntamos para ir a la cabalgata. Ya por la noche, tocaba cena en casa de mi hermano Alberto, pero antes… ¡los REGALOS! Si hubierais visto a toda la “trouppe” (éramos unos 12, entre mayores y niños) buscando por todos los rincones del salón… ¡aquello parecía un manicomio! Diez minutos después, el suelo estaba lleno de papel de regalo y envoltorios varios.
La verdad es que este año (como he sido muyyyy buena…) y a pesar de la dichosa crisis, SSMM se han estirado, puesto que mis regalos eran: unas botas altas, una colonia, el libro “Los hombres que no amaban a las mujeres” (sí, aunque parezca mentira, creo que soy de las pocas personas que todavía no lo han leído…), un suéter y un cd de música pop española.

Al día siguiente la comida era en casa de mis abuelos paternos, y como mi abuela Carmen es un poco “exagerá” para todo, hizo comida para un regimiento (mi padre siempre le dice que se modere un pelín porque, después de tantas comilonas seguidas, el estómago ya no da más de sí, pero nada… ¡que no hay manera con la “abu”!).
Y como no puede faltar, de postre: el roscón. Eso sí, atrévete a decir que no quieres, porque en mi familia te amenazan con atarte a la silla y meterte todo el trozo en la boca (sin importarles siquiera tu agónica muerte por atragantamiento…). Así que decidí coger un trocito pequeño y ¡oh, qué suerte la mía!: me salió el Rey Mago. Por cierto, mi foto con la dichosa coronita ha pasado a ser un documento no clasificado y no llegará a ver la luz nunca (hermanito, sé dónde guardas la cámara…)

El resto de días – jueves y viernes – estuve currando (ver la entrada “Síndrome Post-vacacional” para saber el efecto que tiene en mi), mientras que el fin de semana lo pasé con Jaime en su piso (tenía que perder alguna caloría, je, je, je).


Por cierto: he descubierto que, después de España, los países en lo que más se lee mi espacio son EEUU e Inglaterra… ¡¡mi blog es internacional!! ¡Nunca lo habría pensado!
Así pues deciros que me haría mucha (muchísima) ilusión, que dejarais un comentario indicando desde qué parte del mundo me leéis (aunque podéis explayaros, of course!)

¡Hasta el próximo post!

martes, 5 de enero de 2010

2010

Ya ha llegado el 2010… En cierto modo, tenía ganas de que terminara el 2009, pero con la que está cayendo en el país (bueno, y en todo el mundo, claro), solo le pido al nuevo año salud para mi familia y amigos y, para mi, quedarme como estoy. Voy a intentar quejarme menos de todo (sobretodo del curro) y disfrutar de la vida, con sus momentos buenos y malos.

Y hablando de buenos momentos, deciros que la Nochevieja ¡fue todo un éxito! Me lo pasé genial: riendo, bailando, cantando… ¡¡incluso hice de gogó!! (Qué vergüenza, por Dios… con lo mal que se me da a mi bailar y no se me ocurre otra cosa… espero que no haya videos por YouTube de los “simpáticos” de mis amigos…).
Así que pasé de no apetecerme salir, a volver a casa a las 8 de la mañana… Cosas de la vida, no?


En cuanto a mi anterior post, esta mañana nos hemos dado los regalos en la oficina. Los hemos ido dejando bajo el árbol de Navidad que montamos todos los años (o mejor dicho, que monto yo, porque si es por mis compañeros…), y una vez estaban todos, los hemos abierto.
La verdad es que el mío me ha gustado mucho (eran unos pendientes de plata muy monos) y creo que a Gonzalo también le ha gustado el suyo (al final opté por un bolígrafo que vi en el escaparate de una tienda de regalos). Después hemos estado un buen rato tratando de averiguar quién era nuestro “amigo invisible” y he descubierto que a mi me tenía Sonia, la chica que está en la recepción.


Y esta noche ¡los Reyes! Como he sido bastante buena, creo que este año no me dejarán carbón… ¿Y vosotros? ¿Os habéis portado bien?